Si, quiero... con esas simples dos palabras terminan muchas, muchisimas peliculas de Hollywood que confirman lo que entonces se consideraba un mandato social: casarse, tener chicos, envejecer juntos. Esta situacion cambio con el tiempo y hoy en dia el "si, quiero", tal vez no sea tan potente como en los años cuarenta, cincuenta o sesenta pero sigue siendo cuanto menos complicado evadir, igualmente, la presion social.
¿Porque? Porque los padres de la novia y la misma novia, llegado cierto tiempo en pareja, sienten que es hora de formalizar frente a los demas (ese tribunal irrecusable formado por parientes, amigos, vecinos y compañeros de trabajo), de poner las cosas en papel.
Los problemas empiezan apenas dado el anuncio del futuro compromiso porque lo más comun es que, como sucede desde que el mundo es mundo, las futuras suegras comiencen una carrera para ver quien toma a su cargo los preparativos para la boda.
En esos momentos, luego de aceptar casarse, el novio pasa a ser un cero a la izquierda que contempla todo con algo de panico, dandose cuenta que ese dia que parecia tan pero tan lejano finalmente llego.
Lo que ese novio no sabe -y deberia saber- es que cuando todo este organizado y listo, cuando las tarjetas esten enviadas, el salon alquilado, la iglesia reservada y los padrinos listos para asumir su compromiso, todavia falta algo: como llegar a la iglesia.
Y para ese momento trascendental, momento en el cual un millon de personas sacaran sus camaras, hay que estar a la altura de las circunstancias y la unica manera de estarlo es contratando a Sauclass, quien cuenta con el mejor alquiler de coches clasicos en Valencia.
Si quiere saber más al respecto solo ingrese al sitio web de Sauclass: http://www.sauclass.com/
|